“Cuando Sebastián y yo decidimos vender nuestra casa en Santa Fe, Nuevo México y como nuevos residentes permanentes de México, hacer de Pátzcuaro nuestro nuevo hogar, nos enfrentamos al reto de encontrar un inmobiliaria local con experiencia que nos ayudara a lograr nuestros objetivos.
Sabíamos por nuestras lecturas previa acerca de la ley de propiedad mexicana, y nuestras búsquedas en Internet, que esta elección de los agentes inmobiliarios sería la más importante para nosotros. Afortunadamente, a través de recomendaciones constantes de los miembros de la comunidad de expatriados de Michoacán, encontramos la empresa de Mexatua Bienes Raíces, y conocimos a su fundadora, Liliana Elena González Castro, que es a la vez abogada y agente de bienes raíces bilingüe y con licencia.
Pasamos varios días viendo propiedades con Liliana, quien nos enseñó mucho acerca de lo que realmente necesitábamos en comparación con lo que inicialmente habíamos imaginado que queríamos. Liliana fue muy amable mientras pacientemente nos veía evolucionar como compradores. Luego le pedimos a Liliana que nos mostrara una propiedad que habíamos visto en la pagina de Mexatua. Tan pronto como vimos la propiedad, supimos que habíamos encontrado nuestro nuevo hogar. Liliana y los vendedores (quienes también eran sus clientes) nos informaron desde el principio que había importantes cuestiones de las escrituras que tendrían que ser resueltas antes de que la compra pudiera proceder.
Los problemas de escrituración son comunes en México, y algunas personas nos aconsejaron seguir adelante con nuestra compra y resolver los problemas más tarde. Liliana se negó firmemente a tomar ese camino, insistiendo que los problemas de escrituración se resolvieran por completo antes de que la venta se cerrara. Estaremos eternamente agradecidos con Liliana y Mexatua por esa decisión.
Tomó más tiempo de lo que esperábamos, pero hoy estamos disfrutando de la hermosa casa de adobe de nuestros sueños, con la tranquilidad que viene de la dedicación singular de Liliana a sus clientes y a su profesionalización de las prácticas inmobiliarias mexicanas.
Recomendamos los servicios de Liliana sin reservas y con sincero respeto y aprecio”.
John Gordon y Sebastian Lujan
Pátzcuaro
